Capítulo 12x: Purgar al traidor

Requerimiento: Tener menos de 15 unidades vivas (en total) al final del capítulo 12

105 – Cap.12x: Por su gente.
- Dejanira: ¿Has oído, Horace? Parece que los rebeldes han vuelto a tomar el palacio. ¡Esos akaneos son unos canallas! Y todo por culpa de Camus. Deberíamos haber acabado con su princesita como hicimos con los demás…
- Horace: (…)
- Dejanira: ¿Eh? ¿Te pasa algo, Horace? No me digas que estás pensando en volver con tu antigua patria. Si así lo hicieras, bien sabes lo que pasaría a los tuyos.
- Horace: ¡Lo sé! ¡Lo dejasteis bien claro en su momento! Yo ya no soy un caballero akaneo… Sabía que llegaría este día cuando ofrecí mi lanza al servicio de Doluna. Descuidad, sé cuál es mi deber.
- Dejanira: Así me gusta. Reúne a tus hombres y acaba con esos rebeldes antes de que ocasionen más molestias.

 

106 – Cap.12x: Dejadlos actuar.
- Soldado: Lord Horace, nuestros soldados están en posición.
- Horace: Perfecto.
- Soldado: ¿Avanzamos hacia el enemigo?
- Horace: No. No será necesario. Los atraeremos hacia aquí para luego saltar sobre ellos. Que nadie se mueva hasta que el enemigo dé el primer paso, ¿entendido?

 

107 – Cap.12x: Horace ha elegido.
- Marth: ¡Lord Horace! Soy Marth de Altea. Os ruego que depongáis vuestras armas.
- Horace: ¿Está a salvo la princesa Nyna?
- Marth: Sí. Y está muy preocupada por vos, señor.
- Horace: Así que su Alteza está viva… Entonces los soldados que murieron por salvarla pueden descansar en paz. Y ahora, príncipe Marth… ¡Desenvainad vuestra espada!
- Marth: ¿Qué? ¡Pero lord Horace!
- Horace: Elegí traicionar a Akaneia, y debo afrontar las consecuencias de mis actos. La princesa Nyna ha regresado al palacio y Akaneia ha recuperado su reino. No siento ningún remordimiento.

 

108 – Cap.12x: Honra mancillada.
- Anciano: Lord Horace, el antiguo señor de esta tierra, era caballero de Akaneia. Sin embargo, cuando el palacio cayó, ofreció su lanza al servicio de Doluna, a cuyo emperador sirve ahora. Por eso la gente dice que es un traidor y que ha mancillado su honor como caballero. No son más que tonterías. ¡Violó su juramento de caballero por protegernos! ¡No es un traidor! Por favor, señor, tenéis que ayudarle a limpiar su honor. Tomad esto… El padre de lord Horace, que en paz descanse, me obsequió esta espada hace tiempo. Sé que estaría encantado de que vos la usarais para restaurar el honor de su hijo.

 

109 – Cap.12x: Salvadlo, por favor.
- Aldeana: Señor, ¿sois de la Alianza? ¡Por favor, salvad a lord Horace! ¡Os lo ruego! Siempre ha velado por nuestro pequeño pueblo antes y después de heredar esta tierra. Es un hombre de gran coraje. De no ser por la difíciles decisiones que tuvo que tomar, ahora mismo estaríamos todos muertos. Lo menos que podemos hacer ahora por él es sacarlo de esta terrible situación. Tomad, aquí tenéis el libro mágico que uno de los aldeanos encontró tras la última batalla en nuestra tierra. Pero prometedme que encontraréis una manera de salvarlo. ¡Prometedlo!

 

110 – Cap.12x: Tras el combate.
- Horace: ¿Qué? ¿Dejanira ha muerto? Entonces… todo ha terminado. ¡Soldados! ¡Tirad las armas! ¡No derramaremos más sangre akanea! La mía será la última…

 

111 – Cap.12x: Purgar la traición.
- Horace: Bravo, Príncipe Marth. Habéis vencido. Podéis hacer conmigo lo que queráis, pero perdonad la vida a mis soldados y no le hagáis daño a mi gente.
- Aldeano: ¡No! ¡Esperad, por favor! ¡Lord Horace es un buen hombre! Doluna lo amenazó diciéndole que arrasaría toda esta tierra si no se entregaba…
- Horace: ¡Silencio! ¡Ya has hablado demasiado!
- Marth: Pero lord Horace…
- Horace: Traicioné a Akaneia y manché el nombre de sus caballeros. ¡No voy a ocultar mis pecados! Acepto mi castigo. Dejad que tenga la muerte de un caballero.
- Nyna: ¡No lo permitiré!
- Horace: ¿Cómo?... ¡Oh! ¡Princesa Nyna!
- Nyna: Horace, he oído tus palabras. Y, desde luego, no te falta razón. Tus crímenes merecen la muerte o incluso algo peor.
- Marth: Princesa Nyna…
- Nyna: Sin embargo, no te daré la muerte de un caballero. Te daré la vida de un traidor. Dices que no quieres ocultar tus pecados. Bien, pues tampoco huirás de ellos.
- Horace: ¡Alteza! ¿Acaso decís que queréis que siga con vida?
- Nyna: Hiciste todo lo que estuvo en tu mano para proteger a esta gente, Horace. Eso es algo muy honorable. Pero si mueres hoy aquí, nadie te recordará por nada salvo por tu traición. Tus soldados tendrán que soportar la deshonra que les has causado. ¿De verdad crees eso justo?
- Horace: (…)
- Nyna: ¡A partir de ahora tendrás que probar al mundo que tus acciones fueron en realidad un acto de valor! Esa será tu purga. ¡La purga de un traidor! ¡Honra la memoria de los soldados que lucharon y murieron por ti!
- Horace: No… no sé qué decir…
- Nyna: No hace falta, Horace. Ya he decidido por ti. Lucharás por nosotros… y no permitirás que te arrebaten la vida. Te lo prohíbo.
- Horace: Muy bien, Alteza. Como vos ordenéis…

 

112 – Cap.12x: Traición pagada.
- Marth: Princesa Nyna, hemos acabado con las fuerzas de oeste.
- Nyna: ¿Y Horace?
- Marth: Princesa Nyna, me temo que…
- Nyna: Oh, pobre Horace… Marth, no creo que el corazón de Horace quisiera realmente traicionar a Akaneia.
- Marth: Yo tampoco. Supongo que Doluna lo habría amenazado con hacer sufrir a su gente.
- Nyna: Así que Horace se alió con el enemigo para proteger a aquellos que dependían de él… Y, a pesar de que murió para salvarlos, el mundo lo recordará como a un traidor. El autor de una traición cometida para proteger la vida de los demás y que ha pagado con la suya propia.

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